domingo, 2 de diciembre de 2012

Manías..


Tengo la manía de hacerlo todo de golpe.
De pensar en el momento, de olvidarme de lo que viene después.
El vicio de mirar a los ojos y el de desconfiar a la mínima.
El de decir lo que pienso sin reparo alguno.
El vicio de no parar hasta caerme, o hasta que consigan pararme.
El de cantar en la ducha la canción más penosa del mundo, o el de arriesgar al máximo con los bordillos de las aceras.
El de querer a alguien al límite, pero dejar de querer al instante sin me falla.

domingo, 25 de marzo de 2012

Respira.

Canalizas, piensas, respiras.
Horas innecesarias de pensamientos
Momentos abrumados por querer tener tu cuerpo.
Respira, respira, respira
Ya eres mía.
Entre montañas playas y tierras encaminadas hacia tu amor
Delirio de una noche donde ya no queda más que sudor
Pienso te miro y rio
Me miras sonríes, callas, me besas
Incesantes son tus besos
Imposible no quererlos
Entre tu silueta, la curva de tu piel esa que me deja inquieta
Gritos gemidos y mordiscos de madrugada
Respira, respira, respira
Sigues siendo mía.
Recorro tu piel y me duermo contigo hasta el amanecer..
Sigo sedienta de ti...
Respiro, respiras
Me pierdo en tus sabanas en las curvas de tu piel otra vez...

domingo, 29 de enero de 2012

Amores improbables.

La Real Academia define la palabra imposible como algo que no tiene facultad ni medios para llegar a ser o suceder, y define improbable como algo inverosímil 
que no se funde en una razón prudente.
Puestos a escoger a mí me gusta más la improbabilidad que la imposibilidad, 
como a todo el mundo supongo.
La improbabilidad duele menos y deja un resquicio a la esperanza, a la épica.
-Que David ganara a Goliat era improbable, pero sucedió.
-Unos afroamericanos habitando la Casa Blanca era improbable, pero sucedió
-Que los Varón Rojo volvían a tocar juntos era improbable, pero también sucedió
-Nadal desbancando del número uno a Federer
-Una periodista convertida en princesa.
El amor, las relaciones, los sentimientos…
no se fundan en una razón prudente por eso no me gusta hablar de amores imposibles sino de amores improbables
porque lo improbable es por definición probable. 
Lo que es casi seguro que no pase es que puede pasar
Y mientras haya una posibilidad
media posibilidad entre mil millones de que pase 
...vale la pena intentarlo.